Ciudad de México.- El contraste es claro: las 11 victorias en fila del Tricolor de Gerardo Martino contra los 15 años de no ganarle a Argentina.
La Selección Mexicana no sólo buscará esta noche mantener el invicto sino la racha perfecta de 11 partidos en fila, en una prueba de fuego ante el rival que solo ha vencido cuatro veces en 89 años de rivalidad.
La Albiceleste se ha convertido en una tarea pendiente para el Tricolor desde hace mucho.
En 30 partidos en cualquier tipo de competencia, México solo ha ganado 4, perdido 14 y el resto han sido empates.
Argentina es el rival de mayor jerarquía que ha enfrentado el Tri en este año, un 2019 en el que todos los contrincantes han sido equipos de Sudamérica y los de la Concacaf por la Copa Oro.
La última vez que México derrotó a los argentinos fue en julio del 2004 durante la Copa América de Perú. Desde ahí ha habido otros nueve partidos, siete de los cuales ganó la Albiceleste.
Sin embargo, el equipo de Lionel Scaloni sigue sin convencer y llega a este partido tras un empate sin goles frente a Chile el viernes pasado, cuando México goleó 3-0 a Estados Unidos.
El cuadro del Tata se ha mostrado cada vez más solvente, con un futbol de consistencia e ideas claras a la ofensiva. Mejor aún, Martino se reservó a su cuadro estelar para esta noche, que también marcará para él la primera vez que enfrente a la selección de su país, desde que la dejó de dirigir en 2016.
Sin Lionel Messi, Argentina sufrió las bajas de Giovani Lo Celso y Nicolás Otamendi para este juego, mientras que el Tri también perdió a varios para este juego, aunque ello no cambia los planes del Tata.
El Chaka Rodríguez y César Montes no estarán por lesión, Rodolfo Pizarro por una apendicitis y Erick Gutiérrez por una fractura en la mano, además de Andrés Guardado por un permiso por su próxima nueva paternidad.