Muchos de los trabajadores que acuden a sus servicios de salud correspondiente se topan con la sorpresa de que no cuentan con el medicamento que necesiten o que deben esperar a que les surtan la receta, esto fue lo que más sospechas empezaron a causar entre propios y extraños.
Sin embargo ahora se da a conocer que la situación deriva de que a los empleados si les retenían las cuotas correspondientes para los servicios de ICHISAL o Pensiones Civiles del Estado, pero la Junta Central de Agua y Saneamiento no lo depositaba a las áreas correspondientes, “jineteándolo” o gastándolo en otros rubros que nada tienen que ver.