Ciudad de México— La Liga BBVA MX está lista para el regreso del público a los estadios, el cual estará sujeto para cada club al aval de las autoridades municipales y estatales, además de la federal.
Ese retorno de la gente a los inmuebles tendrá que hacerse bajo un estricto protocolo de sanidad, que impide el acceso de menores de 12 años, así como una serie de restricciones para las porras.
Cancha tuvo acceso al documento, en el que se desprende que el aforo lo determinará la autoridad con el semáforo de cada entidad, y con estas nuevas medidas, las barras perderán parte de su colorido y esencia, pues las zonas donde habitualmente se colocaban permanecerán cerradas, no se venderán entradas en bloque para grupos de animación, ni se permitirán traslados masivos.
El ingreso de banderas, trapos, instrumentos, cornetas, cartulinas y papel picado quedará descartado, hasta nuevo aviso.
También estará prohibido fumar en los estadios, pues esta práctica genera un alto riesgo de contagio, incluidas las colillas que se dejan en las gradas.
Tendrá que haber sana distancia en las butacas, sólo podrán sentarse dos personas juntas y luego se dejará un espacio, no se venderá más de 4 boletos por familia.
En el documento quedó de manifiesto que se impedirá que haya gente parada en sus lugares, en los pasillos o en las escaleras; además de que en los palcos y áreas VIP sólo se permitirá el acceso de un 50 por ciento de su capacidad.
Los asistentes tendrán que usar obligatoriamente y de manera correcta el cubrebocas y se someterán a la toma de temperatura.
Se implementará la sana distancia en los estacionamientos, y se pagaran vía prepago o internet. La venta de boletos será vía electrónica.
Los estadios tendrán que sanitizarse antes y después de cada encuentro por una empresa certificada, se tendrán que instalar dispensadores de gel en túneles, palcos y pasillos.
Los inmuebles tendrán que modernizarse porque se promoverá el pago de comida y bebida con tarjetas de crédito o débito, para evitar el intercambio de billetes o monedas.
En dicho documento también se dejó en claro que el Covid-19 está evolucionando y muchos aspectos siguen sujetos a una incertidumbre significativa, por lo cual reconocen que no existen precauciones que puedan eliminar por completo el riesgo de exposición, contaminación o transmisión del virus.