Noticias de Chihuahua.- La denuncia que salió a decir públicamente el ex alcalde de Chihuahua Javier Garfio representa para el actual alcalde Marco Bonilla, la prueba de que en ocasiones el poder enceguece y las autoridades se sienten el brazo ejecutor de la justicia cuando no es así.
“Muchas veces actores políticos se creen que dictan o juzgan la justicia y no, la letra está inscrita en las leyes, en la Constitución del estado y de la federación, y es ahí donde se establece cuál es el proceso que debe seguir cualquier imputado de cualquier tipo de delito”, dijo este lunes al respecto y sin decir el nombre de alguna persona, en este caso de Javier Corral.
Consideró como “muy importante el tema de que no debe existir impunidad en cuanto a quien comete un delito y no sea juzgado y sentenciado, pero tampoco debe existirlo en las instancias que debemos impartir justicia”, se agregó también, aun cuando un alcalde tampoco tiene facultades de impartir nada.
Sin embargo, aseguró que ellos como autoridad, al menos, “debemos ser el ejemplo y en este caso serán las instancias judiciales las que determinen la situación sobre todo si se respetó o no el debido proceso”.