En esta ocasión fue el tribunal de primera instancia de Bad Oeynhausen, quien la sentenció con una condena que es reducible, a 11 meses son derecho a libertad condicional.
El juicio fue presenciado por más de cincuenta seguidores de Ursula Haverbeck, todos ultraderechistas que la ven como su heroína y en varias ocasiones interrumpieron el proceso, uno de ellos fue sacado de la sala.
Esta es la sexta vez que Ursula Haverbeck es sentenciada por un delito similar: en tres ocasiones anteriores se le ha fijado una multa que ha ido de los 2 mil setecientos a los 6 mil euros, las otras tres veces ha sido condenada a pasar ocho, diez y ahora once meses en prisión.
Hasta el momento ha cumplido con todas sus sentencias y nunca se a retractado de sus palabras.