Por La Fare
Luego de meses en confiar en que las autoridades norteamericanas deportarían al ex gobernador César Duarte, como dieron señales todavía en el mes de mayo, Javier Corral se cansó de la espera y compromete al gobierno federal, para que cumpliendo con sus competencias pida la extradición del Ejecutivo que más descaradamente ha saqueado al erario en Chihuahua.
La esperanza de Corral empezó a decaer luego del 23 de mayo en que César Duarte debía acudir a las oficinas de migración a continuar un trámite que buscaba la residencia legal en el vecino país.
Desde octubre pasado el ex gobernador alternó su residencia en las tres residencias que oficialmente tiene en la ciudad de El Paso, Texas, aunque hay quienes afirman que por lo menos es una media docena.
En esta primera parte de su estancia en la vecina ciudad intentaba llevar una vida normal y confiaba en que obtendría la residencia legal por cualquiera de estas tres vías: alguna de sus dos hijas le “arreglaría papeles” dado que son ciudadanas norteamericanas; tenía en trámite una solicitud de visa para negocios y finalmente se dijo perseguido político y trató de obtener asilo.
En este tránsito contrato al mejor despacho de Estados Unidos, especializado en asuntos migratorios, con sede en Nueva York y ellos se han encargado de prolongar con argucias legales la estancia de Duarte Jáquez en el extranjero.
Ayer, ya sin esperanzas de que Duarte fuera entregado a la justicia de Chihuahua, se presentó ante la Procuraduría General de Justicia y les hizo entrega de 70 carpetas que contienen 10 casos de peculado agravado y 50 discos compactos , con anexos.
Fueron cinco las cajas que entregó y sólo de los delitos cometidos por César Duarte, queda aún muchas carpetas de los cómplices que le ayudaron a saquear el estado, al estilo de la delincuencia organizada, ha dicho en repetidas ocasiones Corral Jurado.
El primer paso es traducir al inglés las pruebas documentales de un daño al erario por mil 76 millones de pesos, es una labor tan colosal que se plantea no únicamente que los traductores de la unidad de la PGR se dediquen a la labor, sino que un despacho certificado por la propia PGR, asuma parte de la ingente tarea.
De las 70 carpetas y los 50 discos compactos, que contienen las pruebas del latrocinio, se desprenden diez órdenes de aprehensión.
El anuncio se hizo en la Ciudad de México, porque allá se entregaron los documentos y la cobertura mediática fue de gran envergadura, era una noticia que se esperaba, que tardó mucho por la intención del gobierno de Chihuahua de mantener en su ámbito el juicio el ex gobernador, por las suspicacias que despierta la amistad del procurador Raúl Cervantes y el ex gobernador.