Chihuahua.-Un total de 60 años de prisión podrían pasar policías y escoltas infiltrados en el narcotráfico y que cometan asesinatos, según se ventilo este día en el Congreso del Estado de Chihuahua.
Fue la diputada por el PAN Laura Marín, quien dio a conocer dicha propuesta para que sea aprobada por el pleno al considerar que se debe proteger al ciudadano de las arbitrariedades policiacas, toda vez que se pretende aumentar hasta en 60 años de prisión, la pena de homicidio cometido por los cuerpos de seguridad o por personas que pertenezcan a empresas dedicadas a la seguridad privada.
Esta iniciativa no pretende limitar las acciones policiacas, sino que se encamina a castigar severamente a aquellos agentes que aprovechándose del “Poder”, se incrusten en la delincuencia organizada y utilicen la confianza que el Estado y la ciudadanía les otorga para cometer este tipo de atrocidades, es por ello que es necesario que se tengan penas severas para empezar a acabar con la infiltración dentro de los cuerpos policiacos, menciono Laura Marín.