LAS malas, rastreras y ponzoñosas lenguas aseguran que el empresario local, Maurilio Ochoa, está preparando un fuerte apoyo para destinarlo hacia el sur del país en beneficio de los damnificados por el terremoto conocido como el 7.1
Sin hacer tanta testera aseguran que el desprendido chihuahuense podría hacer un anuncio “oficial” de los apoyos que mandará, y sería bajo sus propios medios, pues eso de confiar en el gobierno no cualquiera y menos si siente que trae cola que le pisen.
Con esto Ochoa intentara limpiar su imagen ante el colectivo social, ósea ante sus enemigos políticos que en cada oportunidad que tienen le atacan sin importar el frente.
Maurilio Ochoa sabe que estaría difícil pelear por la alcaldía, pero la diputación federal la conoce bien y esto es una oportunidad para levantar la mano de pasada en el CEN del PRI.
OTROS que se pusieron “guapos” fueron, los legisladores federales, Alejandro Domínguez y Alex Lebaron, quienes soltaron unos miles de pesos para los damnificados, y junto con el resto de sus compañeros lograron juntar 60 millones de pesos.
La cantidad fue oficializada, pues fue una mentada que se haya pactado que solo donarían un día de salario. Dicen también que Alex se llevó un buen susto tras el sismo, pero no pasó a mayores y sigue afinando los detalles de su informe que presentará el próximo mes.
PARA bien o para mal, el sismo que sacudió nuestro país se ha convertido en un terremoto electoral, primero porque se logró que los partidos políticos se desprendieran de sus presupuestos para entregarlos a quienes más lo necesitan.
Luego porque el PRI ve una mina de oro, en la que si su presidente Enrique Peña Nieto se pone las pilas le dará una esperanza más a la militancia que estaba urgida de una oportunidad.
Los expertos en materia electoral nos afirman que el INE no solo modificará las leyes para poder transferir recursos a los damnificados, sino que ante la situación también cambiara las reglas del juego, esto en beneficio de los candidatos quienes al no tener dinero del erario podrán recurrir a financiamientos privados, y con tal de que ayudan a la gente, pues que le metan dinero.
PARA no dejar pasar, nos comentan que el que ya anda buscando patrocinadores y de los buenos, es el presidente del PRI Estatal, Omar Inn Bazán Flores.
El habilidoso político, ya está reuniéndose con diferentes empresarios locales, jóvenes y grandes de todos los sabores para ver cuánto están dispuestos a meterle a las próximas campañas electorales.
Aunque muchos ven a Omar Inn como un líder que nomás no cumple sus compromisos, otros desde más arriba lo observan cómo alguien que está buscando un objetivo claro: recuperar el Congreso del Estado a como dé lugar.
Sus allegados afirman que la estrategia del líder del PRI es utilizar los medios necesarios para recuperar el poder, luego ya después de eso conciliar con los grupos locales, y desde luego convertirse en una piedra en el zapato del Crepúsculo al Amanecer.
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