“Como se ha dejado suelto esto, lo delicado es que vayan a llegar a hechos violentos como ya ha sucedido, por el hecho de que no le entramos al asunto porque este servicio entró así de pronto inconformando a un gremio que ya está establecido, entonces debemos encontrarle solución”, señaló.
Es una realidad innegable, añadió, que el servicio de Uber ya está en la ciudad, desde junio, y que hay personas que no están de acuerdo con ello, y a pesar de los conflictos que se han generado, ninguna autoridad o institución ha tomado el problema para evitar mayores problemas.
A pesar de que desde la perspectiva del usuario, los taxistas estarían atentando contra su derecho de viajar donde ellos quieran, Armendáriz dijo que no se trata de un asunto que pueda dirimir la comisión plenamente como una queja, sino que los usuarios, como consumidores de un servicio, podrían acudir a la Procuraduría Federal del Consumidor.