Ahora ‘Alfredo Salazar’ estrega narco-despensas

Chihuahua.- Primero fueron despensas del líder criminal apodado “El Bin Laden” con los paquetes donde se hace notorio el rostro del terrorista saudí, y ahora otro grupo criminal local hace lo propio, pero con las iniciales “AS”, de Alfredo Salazar.

Según archivos periodísticos, ambos grupos criminales son ramas del Cartel de Sinaloa, y se unen a esta “narco-moda”  a nivel nacional apoyando a la ciudadanía en esta contingencia sanitaria.

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APROVECHANDO LA PANDEMIA

Días después de que se dio a conocer la noticiad de que en estados como Sinaloa, Jalisco, Morelos, Veracruz, Tamaulipas, Guerrero, Colima, Michoacán, y Guanajuato, los grupos criminales están aprovechando la pandemia para entregar despensas y promover, ahora le tocó a Chihuahua.

En carros nuevos y con cubrebocas de color negro, jóvenes hacen entrega de las despensas a habitantes de los límites de los estados de Chihuahua y Sonora, y les toman en video un agradecimiento.

En un video que se difundió en las últimas horas, y que se desarrolla con el narcocorrido “El mandamás” como fondo, la gente manifesta expresiones como “gracias, señor Salazar”, en alusión a Alfredo Salazar, uno de los cabecillas del grupo, o “gracias por la despensa, la estábamos esperando”, incluso uno se atreve a decir “gente nueva”.

Desde hace algunas semanas, y aprovechando la emergencia sanitaria por Covid-19, integrantes de diversos grupos delictivos han realizado acciones similares, sin que ninguna autoridad intervenga, a pesar de que cada caja o bolsa entregada tiene imágenes o leyendas que identifican a presuntos narcotraficantes como benefactores.

Donde sí hubo un extrañamiento fue en redes sociales, donde sin conocer a fondo la situación de los beneficiados, recriminaban que hubieran aceptado la ayuda de quienes se dedican a extorsionar, asesinar y envenenar a jóvenes y adultos con sustancias ilícitas.

En 2005, el periodista Alfredo Jiménez Mota desapareció en Sonora. Más de una década después Miroslava Breach, corresponsal de La Jornada fue asesinada en Chihuahua. Una familia liga ambos casos: los Salazar.

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