El precio de la gasolina ha aumentado un promedio de 6.3 por ciento y el del diésel 6.1 por ciento en el último mes, debido principalmente al incremento del petróleo en los mercados internacionales, de acuerdo con un cálculo elaborado por El Economista y basado en datos de la Comisión Reguladora de Energía.
Esto, pese a que la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) disminuyó el Impuesto Especial sobre Productos y Servicios (IEPS) que cobra por los combustibles.
Un análisis del diario especializado indica que el precio promedio del litro de gasolina de bajo octanaje era de 16.30 pesos por litro a inicios de año, cifra que creció a 17.33 pesos por litro en los primeros días de febrero; el diésel, por su parte, pasó de 17.16 a 18.17 pesos por litro en el mismo periodo.
La gasolina de algo octanaje tuvo un menor incremento, al pasar de 18.05 a 18.98 pesos por litros en el periodo arriba referido.
Ante el aumento en el precio de las gasolinas, la SHCP determinó incrementar el estímulo fiscal hasta llegar a 2.35 pesos por litro en el caso de gasolina de bajo octanaje, 53 por ciento más que el subsidio de diciembre.
En el caso de la gasolina de alto octanaje, la cantidad que dejó de cobrar Hacienda por litro fue de 1.16 pesos, también 53 por ciento más que en el último mes del año pasado; en el caso del diésel, el estímulo fue de 2.8 pesos por litro, 46 por ciento más que en diciembre pasado.
