Chihuahua.- Niños, hombres, mujeres, ancianos y hasta bebés de la etnia tarahumara de las distintas comunidades, entre las que destacan Wahuachique, Gupítare, Baciawari, Borachi, Sowebachi, Norogachi, La Laguna, Panalachi y Choguita, iniciaron una larga caminata de más de 230 kilómetros, bajo un frío que huele a invierno y bajo un sol intenso, en medio de extensiones de árboles y montañas que bordean la escarpada carretera que atraviesa la majestuosa Sierra Tarahumara de Chihuahua, comenzaron su travesía por mejores condiciones.

Al iniciar en el poblado de San Juanito, con rumbo al poblado de la Junta, luego ciudad Cuauhtémoc y posteriormente a Chihuahua, el contingente parece más bien un éxodo de que una marcha de hombres y mujeres que calzan huarache, en medio de severas condiciones de los terrenos escarpados, el aislamiento e incomunicación.

Luis Carlos González Fierro, rarámuri que encabezala organización de esta marcha, junto con Guadalupe Quintana Guanapeña, Siriame  afirmó que con esta actividad buscan llamar la atención de la sociedad, de organismo, de la sociedad civil s y del mismo gobierno para que le sean solucionadas sus demandas de salud, trabajo, apoyos sociales, así como la declaratoria de emergencia del estado de Chihuahua por la sequía que atraviesa y no les permitió cosechar maíz y productos del campo ni siquiera para autoconsumo lo que ya les lleva a vivir una crisi humanitaria.

Indicó que, a pesar de haber tenido el compromiso del presidente Andres Manuel López Obrador el año pasado, durante su visita a San Juanito, de resolver sus problemas, no han tenido ninguna respuesta, ni del representante del gobierno federal en el estado y mucho menos del mismo.

Añadió que ahora cuentan con menos becas que antes y que su problemática son ya muy fuertes, además de que los niños no pueden estudiar, pues en sus comunidades no tienen ni siquiera electricidad, mucho menos televisión o internet, por lo que solicitó que se busquen otras formas de aprendizaje para los alumnos que generalmente viven en comunidades muy apartadas.

Mientras caminan, una mujer y una niña se detienen a descansar al lado del camino, detrás de ellas, en medio de la boscosa vegetación, se aprecia una pequeña presa con agua enlodada y un río totalmente seco.

Por ese motivo, los rarámuris de la sierra de Chihuahua invitan y solicitan a la  ciudadanía en general y organizaciones públicas y privadas a que les brinden su apoyo con comida, agua y efectivo para la realización de esta marcha que reclama también la exclusión de la comunidad rarámuri de los programas Sembrando Vida, Tandas para el Bienestar y Becas «Benito Juárez» y Producción para el Bienestar.

Finalmente, arribaron a la población de La Junta, donde descansarán para continuar su marcha este martes 25 rumbo a ciudad Cuauhtémoc.