LOS profesores de la Universidad Autónoma de Chihuahua (UACh) andan enchilados, pero un tanto angustiados por el histórico despido del maestro Tomas Chacón Rivera, quien presuntamente hostigaba sexualmente a una estudiante.
La alegata que traen los profesores es que la máxima casa de estudios cedió a presiones meramente mediáticas o en pocas palabras de redes sociales, pues nunca hubo una denuncia formal ante la Fiscalía General del Estado, por lo que no hay delito que perseguir.
A pesar de ello en la UACh también quisieron tomar cartas en el asunto, porque dicen que los directivos tienen una lista detallada de los maestros que se han dedicado a andar de rabo verde con algunas estudiantes, pero para evitar escándalos prefieren mantenerlo en lo oscurito.
Se dice que quien opero directamente el despido del profesor, fue la licenciada Lucia Chavira quien es encargada de la Defensoría de los Derechos Universitarios y que de un tiempo a la fecha se ha vuelto feminista radical, por motivos de interés político.
Señalan que a ahora los profesores temen que por algún tipo de cuestión personal a los estudiantes se les hagan costumbre denunciar a un maestro en redes sociales y con eso baste para despedirlos, sin decir agua va.
SOBRE este punto, y en contraparte se dice que el catedrático de la Facultad de Filosofía y Letras tenía en contra 28 denuncias por acoso contra alumnas universitarias. Es decir, casi 30 personas tuvieron que sufrir el acoso al parecer desde que el actual rector Luis Fierro, era director de esa facultad, para que las autoridades pusieran manos a la obra y atendieran a las afectadas. Sin embargo, dado que la Uach no dio a conocer públicamente el nombre del maestro acosador, que dicen las integrantes de la Colectiva en construcción es Tomas Chacón, como ya señalamos, pero las malas lenguas dicen ahora que quizá es que la UACh solo lo cambió de área y en realidad no lo corrió, habrá que esperar a ver cómo avanza el asunto y si así como se procedió contra este profesor, ocurre en todos los casos que se han exhibido, entre los que, dicen, hay hasta en maestro que embarazó a dos alumnas.
SOBRE le Facebook y las demás benditas redes sociales tundieron al diputado de Morena Miguel Ángel Colunga por querer subir a tribuna el tema de la eutanasia.
Por lo tanto, hubo un giro del líder morenistas ya que la «iba» a presentar, la leyó y al final dijo que mejor consideró no presentarla.
Colunga solo revivió la iniciativa que en 2011 presentó el entonces diputado panista Raúl García Ruiz, para crear la Ley de Voluntad Anticipada para el Estado de Chihuahua, a fin de establecer los mecanismos legales que permitan expresar su voluntad de someterse a procedimientos médicos y tratamiento ante una enfermedad terminal, con el propósito de garantizar la dignidad.
Resaltó de inmediato que a diferencia de lo que ha hecho Morena a nivel federal, esta propuesta local “por ningún motivo tiene como objeto establecer los procedimientos legales para que una persona que padezca una enfermedad crónica degenerativa y se encuentre medicamente en situación terminal, se le apliquen procedimientos médicos o medicamentos a fin de acelerar o privarle de la vida, por el contrario, se pretende establecer los mecanismos que garanticen la vida digna de dichas personas”.
La propuesta de 2011 por parte de la fracción parlamentaria del Partido Acción Nacional, que coordinaba Héctor Ortiz Orpinel, también hacía hincapié qué de ninguna forma se pretende permitir la eutanasia, sino, se pretende regular la ortotanasia, que es dejar que la naturaleza haga su propio efecto cuando ya no hay remedio para una persona que se encuentra en la parte final de su existencia”, es decir, prácticamente dejarla morir en paz.
La propuesta de 2011, que fue desechada, contenía 35 artículos únicamente, 10 menos que la propuesta de Colunga, sin embargo, era más clara en varias aspectos, por ejemplo, en el Artículo 7, que habla de lo mismo en ambas propuestas, sobre el documento de voluntad anticipada que mientras para Colunga debe presentarlo la persona en situación terminal, para Ruiz García podía presentarlo además, sus familiares, padres o tutores.
A excepción de algunos artículos que el documento presentado por el diputado de Morena, ambas iniciativas son las mismas entre sí y respecto a otras leyes que se han aprobado en otros estados del país, como lo muestra en Artículo 22 de Colunga, y 26 en Ruiz, sobre que “es nulo el documento de voluntad anticipada realizado bajo las siguientes circunstancias”, que corresponde al artículo 22 de la misma ley ya aprobada en Sonora y Veracruz, y al 36 de la ley del Distrito Federal, por mencionar algunos ejemplos.
