Noticias de Chihuahua.- Diputados que jamás se pararon en la tribuna, otros que nunca presentaron una sola iniciativa propia sino que se adhirieron a otras, y otros que no atendieron sus comisiones como debían. Los diputados que recién terminaron su encargo en la LXVI Legislatura se fueron dejando 1107 iniciativas sin resolver, y algunos de ellos fueron elegidos para repetir en el cargo.
Tomando en cuenta que durante los tres años de la anterior legislatura se presentaron 3024 asuntos, algunas de las cuales venían de la legislatura precedente, el trabajo de los legisladores habría rendido únicamente cerca de dos terceras partes, en teoría se podría decir que cobraron un sueldo íntegro durante tres años, por solo dos de trabajo.
De acuerdo con las estadísticas parlamentarias de la página oficial del Poder Legislativo, algunas de las comisiones más flojas, con menos reuniones durante los tres años de funciones son la de Seguridad Pública y Protección Civil, que encabezada la diputada reelecta Georgina Bujanda con solo 37 reuniones; la de Desarrollo Social con solo 12 reuniones convocadas por el diputado también reelecto Benjamín Carrera; la de Atención a Grupos Vulnerables que presidía otra diputada reelecta Amelia Ozaeta, con solo 13 reuniones.
Otros diputados que también se reeligieron para la actual legislatura y que no tuvieron mucho “movimiento” en las comisiones que presidían, fueron Gustavo De la Rosa Hickerson en la de Derechos Humanos con solo 20 reuniones en 3 años; Rocío Guadalupe Sarmiento en la comisión de Pueblos y Comunidades Indígenas con 29 reuniones; Luis Alberto Aguilar Lozoya en la de Salud con 25; Omar Bazán en la comisión Segunda de Gobernación con solo 16; y Marisela Terrazas Muñoz en la de Juventud y Niñez, que vuelve a presidir ahora, a pesar de haber encabezado solo 22 reuniones en sus primeros tres años como legisladora local.
La iniciativa más antigua de las que quedaron pendientes fue presentada el 4 de septiembre de 2018, a unos días de haber iniciado la LXV Legislatura, y la última el 30 de agosto de 2021, justo un día antes de iniciar funciones la actual; y muchas de las que no se analizaron ni aprobaron fueron presentadas ante Oficialía de Partes por el diputado priista Omar Bazán.
Entre los diputados más perezosos está Martha Lemus quien solo unas cuantas veces se subió a la tribuna para presentar un asunto o para replicar sobre algún tema, además de presidir la comisión de Familia, Asuntos Religiosos y Valores, que solo celebró 5 reuniones en los tres años de ejercicio legislativo; así como Rubén Aguilar del Partido del Trabajo, quien tiene apuntadas a su nombre algunas iniciativas, pero todas como adhesión a su compañera de partido, y que en la comisión que presidia, la de Trabajo y Previsión Social, solo convocó a reunión en 7 ocasiones.
En el lado contrario está Bazán, quien se ufanó siempre en ser el diputado que más iniciativas presentaba, aunque la mayoría le eran rechazadas y siempre las presentó ante Oficialía de Partes, por lo que pocas veces se le vio tomar la tribuna.
Nada menos, antes de concluir con su primer trienio como diputado plurinominal, porque repite en la actual Legislatura, presentó todo un paquete de más de 100 iniciativas para exhortar al Poder Ejecutivo Estatal, para que considere en el Presupuesto de Egresos del año fiscal 2022, varios proyectos en diversos municipios.
Esta misma acción que presentar iniciativas en bloque lo hizo también en septiembre de 2020, exhortando al Poder Ejecutivo Estatal, para que en uso de sus facultades y atribuciones, fuera considerado en el Presupuesto de Egresos del año fiscal 2021, diversos proyectos en los municipios, y en noviembre de 2018 para pedir también obras diversas en los municipios, algunos de los cuales no fueron siquiera analizados en comisiones.
Un ejemplo de las iniciativas que se quedaron pendientes, es la que presentó la ex diputada Rosa Isela Gaytán Díaz el 30 de agosto de 2019, para exhortar al Fondo de Cultura Económica de la Secretaría de Cultura Federal, a que la librería a inaugurarse en Ciudad Juárez llevara el nombre de José Fuentes Mares, que fue turnada a la Comisión de Educación y Cultura del Congreso, donde nunca se le dio entrada. En los últimos días de junio, la librería fue inaugurada por el todavía entonces gobernador Javier Corral, pero le pusieron el nombre de Dolores Batista.
