-El repudiado de la UACh fue colocado por César Jauregui
-Les da vergüenza Manuel Soledad y lo ‘cortan’
– Mafia de restauranteros en la Canaco

TODOS repudian el nombramiento de  Mario Trevizo Salazar como abogado general de la máxima casa de estudios, menos…la UACh, y su rector, Jesús Villalobos Jión.

Panistas y hasta morenistas han llamado a ese nombramiento una “aberración”, palabra del representante de AMLO en Chihuahua,  Juan Carlos Loera, y un “mal sabor de boca” por el coordinador de la bancada panista en el Congreso del Estado, Mario Vázquez.

También las mujeres, la mayoría alumnas de la UACH, reprobaron al maestro jubilado, y se manifestaron frente  al edificio de rectoría, tapizando su repudio.

Para muchos, su nombramiento salió de Palacio de Gobierno, y tiene nombre: César Jáuregui Moreno, secretario general de Gobierno, pues son íntimos amigos, y buscan pagar favores dándole la UACh al PRI, y al Duartismo. La guerra sucia sale de mismo Palacio, y tiene ojos chiquitos. Por ende, peligra el puesto de Trevizo ya que carece de legitimidad jurídico ante la sociedad que lo elige.

EN la Sindicatura del Municipio de Chihuahua ya le dio vergüenza estar trabajando con un corrupto que defrauda los fondos públicos. Apenas se coloca en #SinPelosenlaLengua la foto de Manuel Soledad Villanueva enseñando sus calcetines locos que se compró de los “moches” a diputados, y en su trabajo, lo “mochan”… ¡Qué cosas!

Como que les dio pena estar trabajando con alguien que esta siendo investigado por  el desvío de millones de pesos en su anterior trabajo como director de Contabilidad y Finanzas del Congreso del Estado de Chihuahua, y que deposito parte de los 4 millones 846 mil 596 pesos a la cuenta de Alejandra Montañez Olivier, esposa del exjefe de Facturación y Cobranza de la JMAS, Luis René Villarreal Pérez, quien fuera asesinado por no pagar deudas.

UNA mafia de restauranteros tienen controlada la Canaco de Chihuahua y su próxima elección de presidente, y los socios lo saben, generándose descontento y desilusión. Este día el priista Maurilio Ochoa desde su oficina en la sede empresarial mando a sabotear un evento de alguien que busca controlar esa mafia, o de perdis para que transparenten los recursos.

Para ello, Ochoa mandó a su lacayo, el vicepresidente de la sección de restauranteros para defender a su candidato “oficial” , Omar Armendáriz, a ocupar ese trono, pues existe la promesa que si gana Omar, sigue el vice a sucederlo, y así se la llevarían “In saecula saeCULOrum” sin dejar de ruñir las costillas de cerdo, y las alitas. La mafia tiene controlada la afiliación de socios, y solo permiten que gente de Omar se registre para que voten por él, y les cobran desde gratis hasta 500 pesos, y los que se dejan, Mil.  Eso sí, nomás no se pretenda que llegue otro “gallo”, pues le tienen pavor sea quien sea, ya que los socios están cansados de cómo ha llevado esa mafia la Canaco a lo largo de los últimos 5 años. Ayer llegó uno, el empresario Fernando Mares, quien a pesar que es consejero de la Canaco,  el vice no lo dejó entrar a las instalaciones para ver por qué a muchos empresarios les cobran hasta 10 mil pesos por ser socio, pues algo huele mal, y no hay transparencia. Pues resulta que a ese vice se puso muy violento, y estaba a punto de usar el muay thai que ha aprendido de su chef tailandés. Nomás levantaba la “patita” y estaba punto de ponerse la banda ceremonial en la cabeza (valores culturales del arte tailandés) para impedir que alguien compita con ellos, pues quieren seguir mamando de la ubre, y mamando también en sus posturas que lejos son de empresarios serios. La gresca en las instalaciones de la Canaco solo sirvió para causar más desilusión entre sus pocos socios, que a decir oficialmente son 6 mil, pero ni a la mitad llegan. Muy mal se vio la mafia de restauranteros.

 

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