EN Aquiles Serdán se expuso una de sus tantas problemáticas: El transporte urbano.
Son más de 35 mil habitantes de las colonias y fraccionamientos que sufren a diario el deficiente servicio de transportes. Madres de familia con sus hijos, estudiantes y personas trabajadoras tienen que esperar largos períodos a la intemperie para subir a camiones saturados y en muchos de los casos deben transbordar, por lo que sus trayectos les pueden tomar horas.
El alcalde , Ariel Fernández, parece que ya se puso las pilas ante esta problemática y declaró que es urgente que este problema social sea atendido y resuelto, pero las autoridades de Transporte y concesionarios no lo pelan mucho.
Los concesionarios de transporte de la CTM, y el director de Transporte, David Holguín, saben de la problemática , pero les vale el reclamo de los vecinos.
EL viernes pasado se aprobó la famosa y polémica reforma universitaria luego de tantos meses de pasearla por todas las facultades y algunos medios de comunicación para convencer a medio mundo sobre sus bondades, que sí tiene algunas como que a cada dos semestres los universitarios podrán obtener un diploma o de preparación universitaria inicial en primero y segundo semestre o profesional en tercero y cuarto, y así sucesivamente. El problema es que se trata de una reforma académica sin tocar para nada lo laboral obviamente, es decir, si una persona que terminó una carrera en ocho o nueve semestres no encuentra trabajo, qué pasará con aquellas que solo pudieron estudiar dos o cuatro semestres, quién los contratará sin experiencia y sobre todo después de haber cursado las cinco materias de tronco común, en primero y segundo semestre, como son Comunicación oral y escrita en español e inglés; Razonamiento ético y moral; Manejo de información; Sostenibilidad y Habilidades digitales y manejo de datos, que si, son necesarias sin duda, pero que cualquiera con un poco de estudio, cursos y diplomados puede obtenerlas sin necesidad de pasar por la Universidad. A ver a dónde lleva todo esto.
NO solo puso los recursos para realizar por primera vez el ejercicio del plebiscito en Chihuahua, sino que además el Municipio emprendió toda una campaña no informativa sino persuasiva para que la gente vote por el SÍ, a pesar de todas las fallas que les han señalado del proyecto que dicen, no es proyecto sino una lista de necesidades, a pesar también del fracaso en el foro que realizaron en contubernio con el Instituto Estatal Electoral y de paso con la Universidad Autónoma de Chihuahua; a pesar además de que con números y datos les han hecho ver que el mismo proyecto cuesta muchísimo menos en otras ciudades del país, donde a lo mucho se habla de menos de 200 millones de pesos, pero nunca más de mil millones, menos seis mil millones como lo propone la alcaldesa María Eugenia Campos. Así, con espectaculares, spots de radio, comunicados, carteles y hasta la página oficial en Facebook “Yo digo Sí al Alumbrado”, el Municipio le ha entrado con todo para lograr que el ejercicio que tendrá lugar el domingo 24 le sea favorable, no solo a la alcaldesa y sus secuaces, no solo al municipio como aseguran ellos, sino a varios de sus amigos a través de las licitaciones que vendrán después si consigue el SÍ más ansiado de su vida.
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