Al parecer está de moda querer ser una Barbie de carne y hueso.
La adicción a las cirugías y el querer alcanzar la perfección llevó a Paris Herms a someterse a radicales cambios con tal de ser una muñecota.
La chica alemana de 26 años aseguró en entrevista con Daily Star que adora a Barbie desde que tiene memoria, motivo por el cual decidió someterse a tantos cambios físicos.
“Empezó cuando tenía unos 5 años. Jugaba mucho con las muñecas Barbie. Me encantaba la belleza y la fragilidad que tenían.
“Yo carecía de confianza y autoestima, tenía el cabello rizado, era demasiado delgada y solía usar gafas“, comentó.
Conocida en Instagram como “La verdadera Barbie de Berlín”, ha gastado cerca de $30 mil libras ($39,000 dólares) en todas sus operaciones; los lugares en donde más sometimientos se ha realizado son la nariz y los pechos.