La realidad virtual (RV) es una tecnología con más de 45 años de existencia; ¡sí, más de 45! Fue desarrollada por Jaron Lanier, en 1980, con la intención de crear un entorno sensorial tridimensional que fuera interactivo y que simule la realidad mediante el uso de modelado por computadora.
En sus inicios, esta tecnología era muy revolucionaria y era considerada como una herramienta del futuro. Sin embargo, al día de hoy, su uso es muy limitado, aunque con varias aplicaciones en diferentes áreas, debido a varias razones que expondremos el día de hoy.
Aplicaciones de todo tipo
La RV ha encontrado pequeños nichos que la han mantenido a flote. Y es que en nuestra era
digital la interacción y la simulación de un entorno real es el santo grial para varias industrias.
Un ejemplo de ello es el sector de las plataformas de online casino, pues siempre están en la búsqueda de replicar la atmósfera que gira en torno a las mesas de juego. Así, se han
desarrollado los juegos con crupier en vivo, en los que se puede disfrutar de una experiencia
inmersiva y en tiempo real desde cualquier lugar.
Las agencias inmobiliarias, en este sentido, han encontrado en la RV una gran aliada, ya que les permite mostrar de forma interactiva y realista los proyectos que están en etapas
tempranas de construcción e, incluso, realizar modificaciones acordes a las necesidades de los clientes.
También tiene aplicaciones en áreas tan diversas como la medicina, gastronomía e inclusive
educación.
Entonces, ¿por qué la RV ha llegado a un punto muerto?
Pese a que la RV es utilizada en diversas áreas, e incluso se llegó a lanzar un software para
recorrer el espacio con RV, presenta un problema que la ha llevado a un punto muerto: no es una tecnología de consumo masivo.
Recientemente, Apple le dio un duro golpe a la realidad virtual, pues, según fuentes no
oficiales, canceló uno de los proyectos más esperados por los entusiastas de esta tecnología, los Apple Vision Pro.
Y ese es precisamente uno de los elementos que han frenado su adopción masiva, la falta de dispositivos accesibles y que despierten interés en el público general. La línea de lentes de RV de Meta, llamada Oculus Quest o Meta Quest, estaban llamadas a revolucionar y
expandir el uso de esta tecnología, pero no han tenido el éxito esperado.
Estos lentes fueron los primeros en tener un precio menor a los 800 dólares, actualmente se comercializan en 500 dólares. No obstante, la falta de contenidos atractivos para el público general es el principal obstáculo que ha llevado a la RV a un punto muerto.
¿Crónica de una muerte anunciada?
Por supuesto, la RV ha encontrado diferentes nichos que la han sabido aprovechar, pero esto no ha sido suficiente como para convertirla en una tecnología impredecible y de gran alcance.
Su diversificación hacia la realidad mixta (RM) y realidad aumentada (RA) parecía una
bocanada de aire fresco para esta tecnología, así como su uso en el Metaverso; sin embargo, está sufriendo el mismo problema que el propio Metaverso: la falta de experiencias que emocionen al público masivo.
También su alto costo de desarrollo de hardware y software para su uso limita la creación de experiencias mucho más interesantes y de gran rentabilidad. Pese a sus más de 45 años de existencia, esta tecnología es, quizás, muy adelantada para nuestro tiempo.
En este sentido, la gran interrogante es ¿le queda tiempo para consolidarse o cualquier intento es una crónica de muerte anunciada? Solo el tiempo lo dirá.