El candidato a la presidencia de Estados Unidos, Donald Trump, hizo campaña en Florida con grupos latinos, quienes le pidieron que recuperara al país.
En el club de golf del magnate en Doral, una comunidad de hispanos rindió culto al aspirante, como si fuera un mesías y le pidieron reparar valores religiosos.
Entre los asistentes estaba el actor mexicano Eduardo Verástegui, quien fue uno de los oradores principales del evento.
Todos en pie con los ojos cerrados, algunos con el brazo en alto apuntando a Trump, o una mano sobre el hombro del expresidente recitaron dos oraciones para pedir a Dios que guíe sus pasos.
Lo ungimos para que sea el próximo 47 presidente de Estados Unidos, para restaurar los valores bíblicos”, declaró uno de los asistentes al evento.
En el encuentro habló de economía y de lo que él considera una prioridad: la inmigración ilegal.
Trump volvió a acusar al gobierno de haber “perdido” a 325 mil niños migrantes que, según él, ahora son “esclavos sexuales, esclavos, desaparecidos o muertos”.
Parece referirse a un informe del Departamento de Seguridad Interior, que afirma que no hay contacto con más de 32 mil niños migrantes no acompañados que no han acudido a la Corte tras quedar en libertad entre 2019 y 2023.
Al encuentro, asistieron los congresistas María Elvira Salazar y Carlos Giménez, el senador Rick Scott, la senadora estatal Ileana García, y los alcaldes de Hialeah, Esteban Bovo, y Miami, Francis Suárez.
Estamos liderando entre los hispanos y eso nunca había pasado antes”, aseguró Trump e indicó que Estados Unidos está en declive y que podría ocurrirle lo que a Venezuela.