Noticias de Chihuahua.- Dos unidades del transporte público Bowí fueron abandonadas durante la madrugada de ayer frente a Palacio de Gobierno, en un intento de boicot por parte de dos operadores que buscaban paralizar el servicio en la ciudad.
Los conductores, identificados como Federico Ponce, alias “El Lico”, y Miguel Escobedo, alias “El Pollo”, habrían actuado bajo la influencia de Román Varela, exjefe de patios, quien fue cesado el mes pasado tras liderar una protesta que detuvo momentáneamente el sistema de transporte.
Tras abandonar los camiones en la calle Aldama, ambos choferes acudieron a los patios para incitar a sus compañeros a sumarse a la movilización, argumentando malas condiciones laborales y deficiencias en el mantenimiento de las unidades.
La Secretaría General de Gobierno, a través de la Subsecretaría de Transporte, intervino de inmediato y logró contener el intento de sabotaje. Los conductores fueron dados de baja y se aseguró la operación normal del sistema Bowí.