EL presidente municipal de Ciudad Juárez Armando Cabada Alvídrez, salió más fregón que el resto de los aspirantes a la gubernatura de Chihuahua.
Cabada ya hizo números para seguir chupando sangre del erario y sumarle al Colectivo Ciudadano, organización que encabeza junto con Marco Quezada, y usarán como trampolín político.
Para ello, sigue sumando jugosos contratos a su Canal 44, donde desde el inicio el 2016 es la primera administración que se autofinancia con un total de 44 millones 200 mil pesos
Y déjeme decirle que el Gobierno Independiente no se mete en problema, ya que para tener ese dinero realiza contratos por adjudicación directa para que nadie se meta en su camino, y el dinero llegue sin problemas.
Así mismo para cocinar sus tranzas en la Sesión Extraordinaria, todo lo hacen a oscuritas negando el acceso hasta de los medios de comunicación.
Y como a todos los juarenses nos tachan de ser unos ingenuos, en febrero del año pasado, el Cabildo de Juárez designó al regidor Carlos Ponce (Independiente) para suplir al alcalde en el proceso de adjudicación de contratos para publicidad oficial con la Intermedia de Juárez, luego de que este último se excusara para no participar en esos procesos debido al conflicto de interés que aceptó tener con la empresa propiedad de su familia.
Fue el Comité de Adquisiciones del Municipio de Juárez quién dictaminó la semana pasada a favor de entregar un nuevo contrato por adjudicación directa, ahora por 11.05 millones de pesos a la empresa Intermedia de Juárez, conocida como Canal 44, propiedad de los Cabada.
MIENTRAS esta red de corrupción existe en la frontera con los Cabada, la inseguridad está peor que nunca, y con estos avances rojos…ya mero somos un deshonroso ejemplo nacional e internacional como ciudad.
Lo bueno de todo es que el delegado del Gobierno federal en el estado, Juan Carlos Loera De la Rosa ya vió que no siempre puede estar de acuerdo con Armando Cabada.
En la pasada reunión regional de Seguridad Pública, el delegado del Gobierno admitió que era grave el número homicidios que se cometen en esta ciudad.
Como sierpe, el presidente Municipal, Armando Cabada Alvídrez dio a tole con el dedo a los presentes e informó que necesitaba más reuniones para corregirlo, y para ello hoy volverá a comprar galletas y café en la Presidencia Municipal donde revisara su “estrategia”.
Mientras tanto los delincuentes se siguen burlando del Plan Juárez de Seguridad, de sus “mapas calor” y de todas sus autoridades.
POR ahí dicen que en el ISSSTE van de mal en peor en cuanto a la atención de los derechohabientes, desde que no hay el mínimo de cuidado en la limpieza e higiene en las habitaciones y peor aún ¡en los baños! hasta la intromisión en los cuartos donde reposan los enfermos, de personal que sin importarle que las personas enfermas estén haciendo sus necesidades o sus familiares bañándolos o cualquier otra actividad de este tipo, sin más abren la puerta cerrada para ingresar y hacer sus labores como cambiar un foco o revisar alguna instalación. Está bien que tienen un horario y deben agilizar su tiempo para terminar sus labores puntualmente, pero no hay que abusar, el primer derecho de los enfermos debería ser una atención puntual y el respeto a su dignidad y eso, dicen los afectados, en el ISSSTE no lo hay.
DONDE tampoco se respetan los derechos de los usuarios es en la plataforma de Didi, que de entrar en operaciones en noviembre de 2018 con una gran expectativa, con grandes promociones y la promesa de un servicio de calidad, poco a poco va perdiendo a sus clientes, justo por su mal servicio. Hay varias quejas de chihuahuenses que han sufrido por la poca atención que Didi tiene para quienes se registran como usuarios en su plataforma, como que los choferes simplemente no van por la gente a la dirección indicada, pero tampoco cancelan el viaje para no pagar la multa por cancelación, como que inician viajes sin haber recogido al usuario y la más común de todas, que los choferes toman el pedido de servicio así estén a kilómetros de distancia, afectando así aún más una de las razones por las que se solicita el servicio, que ya se les hace tarde y deben esperar a veces hasta más de 10 minutos. Algunos de los afectados ya incluso se han dado de baja y mejor prefieren Uber, que lo que sí tiene es que es muy rápido para atender y resolver las quejas de los usuarios, no como en Didi que prometen hacerlo en mínimo una semana y dicen, a veces ni resuelve nada.
