-Benjamín Carrera y sus practicas ‘priístas’
-Abrazos y chingazos, ¿Quién da qué?
-Sale Loera con manos ensangrentadas

AL diputado Benjamín Carrera de Morena le ha salido mucho el “tiro por la culata” en relación a sus críticas contra el PRI, ya que sus acciones son dignas de un priista de hueso colorado, tirándole al rojo pasión.

Primero pagó entre 100 a 300 pesos a varios acarreados para que fueran apoyar a Andrés Manuel López Obrador a Ciudad Juárez durante su reciente visita.

Los “empleados” de Benjamín funcionarían de contragolpe para respaldar al presidente AMLO, por lo que también rentó camiones y estos estuvieron en la mira de las cámaras de los periodistas quedaron grabadas las imágenes y videos donde se aprecian personas que llegaron provenientes de diferentes colonias de Ciudad Juárez.

De igual manera la ciudad fronteriza esta tapizada de espectaculares del diputado, y no se digan las redes sociales donde ha estado invirtiéndole mucho dinero.

De haber sido un priista, de seguro el diputado Carrera ya estaría echándole, y hasta culpándolo de ser Duartista. Así se las gastan nuestros políticos de segunda.

SIN duda, el presidente Andrés Manuel López Obrador y el gobernador JaCo, están jugando a los “abrazos, no chingazos”, pero… ¿Quién lanza qué?

Por un lado el mandatario estatal ya le declaró la guerra a AMLO, y hasta logró hacerse “bolita” con 67 alcaldes de Chihuahua, el Poder Legislativo, activistas y representantes de los sectores eclesiástico, empresarial, productivo y académico, quienes están de acuerdo en meterse al ring con el gobernador en lo que considera «la defensa del federalismo y un presupuesto justo para la entidad». Y por si a AMLO le parece poco la representatividad de los chihuahuenses,  se unen también con JaCo otros nueve gobernadores que conforman la Alianza Federalista (Aguascalientes, Coahuila, Colima, Durango, Guanajuato, Jalisco, Michoacán Nuevo León y Tamaulipas) que realizaron un acto similar en sus respectivas entidades.

Por otra parte, AMLO le contesta con corazones y dadivas al mandarle a Chihuahua un hospital móvil con 20 camas y se prepara el traslado de otras dos unidades; asimismo se envió a 50 médicos en principio.

Por si fuera poco, también López Obrador ordenó que los elementos de la Guardia Nacional que estaban acampando en la presa Francisco I. Madero en Rosales y de la derivadora Andrew Weiss en Camargo, conocida como Las Pilas, se treparan a los camiones y se fueran de Chihuahua. Y si quiere un pilón, han detenido a seis efectivos de la Guardia Nacional, incluido un teniente y un sargento, por su presunta implicación en la muerte de una mujer durante una protesta en la presa La Boquilla, el pasado mes de septiembre.

La propia Guardia Nacional ha señalado que, tras la investigación realizada por la Fiscalía, se han hallado indicios que hacen sospechar de la culpabilidad del personal de institución, algo nunca visto. Los seis efectivos se encuentran ahora a disposición de un juez federal de Chihuahua y se enfrentan a cargos por homicidio calificado y tentativa de homicidio.

Con ello, usted solo dese una idea quién está dando los abrazos, y quien los chingazos.

HABLANDO de “abrazos”, otro acto que se considera de GRATITUD del presidente Obrador es la destitución del delegado federal de programas sociales de la Secretaría de Bienestar, Juan Carlos Loera de la Rosa, quién sale del gabinete con las manos manchadas de sangre por el conflicto del agua.

Del mismo modo se va en medio de denuncias por nepotismo, peculado y desvío de recursos, pero ahora el exdelegado pretende dedicar su tiempo completo a buscar la candidatura del partido Morena por la gubernatura de Chihuahua en las elecciones del próximo año.

Loera ya lo traían entre ojos por algunos malos manejos de dinero dentro de la Secretaría de Bienestar, solo pidió chance de renunciar como un último favor al mismo AMLO.

Andrés Manuel López Obrador, ya le había solicitado la  renuncian antes del 31 de Octubre, y ahora viene una auditoria.

Será Bertha María Alcalde Luján quién  sea la nueva “superdelegada”, y si no se hace “PIO”, puede meter en aprietos a Juan Carlos Loera en su búsqueda por la gubernatura.

Cabe mencionar que Bertha María Alcalde Luján es hermana de Luisa María Alcalde Luján, actual secretaria del Trabajo y Previsión Social federal. Ambas son hijas de Bertha Luján Uranga, presidenta del Consejo Nacional del partido Morena, y quien tiene roces con Juan Carlos Loera al considerarlo alguien conflictivo y no grato para Morena y Chihuahua.

 

 

 

 

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