Chihuahua.- Pocos reconocen no tener estudios superiores, otros dicen verdades a medias, acreditando como terminados estudios inconclusos y otros han mentido vilmente, al ostentarse como profesionales sin contar con la cédula profesional. Obviamente, podrían haber concluido una carrera profesional y no haber tramitado nunca su cédula, pero entonces se trata de personas que no está oficialmente autorizadas para ejercer su profesión y se considera que su carrera está incompleta o trunca. Veamos cómo andan los diputados en el tema.

Por ejemplo, en la propia página del Congreso del Estado y en su currículo específico, la diputada panista y presidente de la Mesa Directiva Blanca Gámez, se ostenta como “lic” en Contaduría Pública, que dice haber obtenido en 1973, pero de la que no hay alguna cédula profesional que la ampare, lo que no significa que no haya estudiado, sino que quizá no ha realizado algún trámite de actualización para obtenerla.

Hay legisladores que, sin tener cédula acreditada ante el Registro Nacional de Profesionistas, presumen tener dos licenciaturas e incluso maestría y/o diplomados, otros más siguen estudiando y otros de plano, sólo llegaron a la preparatoria o no terminaron la educación superior.

DUDOSOS

Por ejemplo, los diputados que no cuentan con cédula profesional son el diputado del Partido Verde Alejandro Gloria quien en su currículo en la página oficial del Congreso menciona la Universidad Latinoamericana Campus Valle y tener estudios en Ingeniería Industrial; la diputada de Morena Ana Carmen Estrada García solo menciona la Universidad Autónoma de Ciudad Juárez, UACJ, como escolaridad en 1993; de Morena también, el diputado Benjamín Carrera Chávez dice tener un doctorado en Economía Agrícola, y además lo menciona como su profesión, pero solo cuenta con cédula de licenciatura por la Universidad Autónoma Chapingo.

Quien también dice ser licenciado en Derecho por la Universidad Autónoma de Chihuahua y titulado por la Universidad Autónoma de Ciudad Juárez, así como tener maestría en Educación es el morenista Gustavo De la Rosa Hickerson, a quien se le olvidó tramitar su cédula o no está diciendo la verdad; lo mismo que Obed Lara Chávez quien dice ser licenciado en Derecho y Lorenzo Arturo Parga Amado de Movimiento Ciudadano, quien dice tener licenciatura y maestría en Educación, pero ninguno tiene cédula.

El diputado que dice tener dos carreras diferentes como maestro de Educación Primaria en la Escuela Normal del Estado, y también ingeniero Agrónomo Especialista en Bosques en la Universidad Autónoma de Chapingo, es el panista Jesús Villarreal y sin embargo, de ninguna carrera cuenta con una cédula profesional, así que los dos diplomados que dice tener en Silvicultura Latensiva en (Helsinki Finlandia) y en Plantaciones Forestales en la República de Chile, también están en duda.

Su compañera de bancada Marisela Terrazas Muñoz asegura tener una Maestría en Educación por la Universidad de Texas en el Paso, y ser doctorante en Ciencias de la Educación por la Universidad Libre de Bruselas, Bélgica desde 2015 a la fecha, y no cuenta con cédula ni de licenciatura.

Tampoco el coordinador de los diputados de Morena Miguel Ángel Colunga Martínez cuenta con cédula profesional de ningún grado, aunque en su curriculum señala ser pasante de Maestría en Economía, Universidad Autónoma de Ciudad Juárez y haber estado en la supuesta “Facultad de Ingeniería Agrónoma” de la Escuela Superior de Agricultura Hermanos Escobar, que en realidad nunca existió como tal.

SINCEROS

Otros de plano pecaron de sinceros y dijeron no haber terminaron estudios superiores como la diputada Patricia Jurado con la Licenciatura en Derecho trunca, o la diputada Martha Josefina Lemus Gurrola del ex partido Encuentro Social, de profesión comerciante y escolaridad primaria y educación para adultos; la diputada de Morena Leticia Ochoa Martínez, quien dice ser secretaria de profesión y tener estudios de primaria y secundaria, así como una carrera comercial; y el diputado de Morena Francisco Humberto Chávez Herrera reconoce tener una licenciatura en Educación y una maestría trunca también en Educación

HONESTOS

Quienes no mintieron fueron la diputada panista Rocío González, quien cuenta con una licenciatura en Administración por el Instituto Tecnológico de Chihuahua II; el del Partido del Trabajo Rubén Aguilar Jiménez con una licenciatura en Derecho por la Universidad Autónoma de Chihuahua, UACH; Miguel La Torre por Facultad de Derecho también de la UACH; lo mismo que Janet Francis Mendoza de Morena, licenciada en Derecho por la UACJ.

Marisela Sáenz, del PRI, presume en cada momento ser abogada, y sí cuenta con cédula por el Centro Cultural Universitario de Ciudad Juárez; Misael Máynez Cano tiene licenciatura y maestría en Economía; Jorge Soto cuenta con una Licenciatura en Administración Financiera por el ITESM.

VERDADES a medias

Otros diputados dicen la verdad a medias, como René Frías quien en su curriculim señala tener estudios en la UPN y en la Normal como licenciado en Ciencias Sociales, pero solo tiene una cédula profesional como profesor en Educación Primaria por parte de la Escuela Normal del Estado Profesor Luis Urías Belderráin; mientras que el panista Jesús Valenciano dice ser licenciado en Ingeniería Industrial por el Instituto Tecnológico de Delicias y tener maestría en Administración por la UACH, pero solo tiene, hasta ahora, cédula como licenciado; en el mismo caso está la legisladora Amelia Deyanira Ozaeta Díaz del Partido del Trabajo, quien dice tener una licenciatura en Educación Secundaria con Especialidad en Ingles y una maestría en Desarrollo Educativo, pero solo tiene cédula de licenciatura.

También la diputada panista Georgina Alejandra Bujanda Ríos solo tiene cédula como licenciada en derecho, pero ella se ostenta con dos maestrías, una en Políticas Públicas Comparadas y otra en Estudios Políticos Aplicados para la que incluso dice haber sido becada por la Fundación Internacional y para Iberoamérica de Administración y Políticas Públicas, quizá la beca no le alcanzó para tramitar sus cédulas como maestra.

Tampoco a la diputada de Movimiento Ciudadano Rocío Guadalupe Sarmiento Rufino le alcanzó el tiempo o el recurso para tramitar la cédula de las tres maestrías que dice tener, ya que solo está registrada como poseedora de una licenciatura en Derecho y de una Maestría en Criminalística Ministerial.

En el mismo caso está la diputada priista Anna Elizabeth Chávez Mata quien dice tener un Doctorado en Administración Pública por un tal Instituto Internacional del Derecho y el Estado, una Maestría en Ciencias en Administración por el Instituto Tecnológico de Parral y la licenciatura en Sistemas de Computación Administrativa  por la UACH, pero del doctorado hasta ahora no hay registro alguno que lo acredite; mismo caso que Lourdes Beatriz Valle de Morena que dice tener la Licenciatura en Educación Física por la UACH, de la que sí cuenta con cédula, y una Maestría en Administración Deportiva de la que no hay comprobante oficial

CURIOSOS

Mientras por un lado, el diputado Omar Bazán Flores incluyó hasta el número de cédula en su hoja curricular, como licenciado en Derecho y maestro en Procuración, Administración de Justicia y Litigación Oral, por otro lado refiere tener también una Licenciatura en Relaciones Públicas por la Universidad de las Américas, de la que sin embargo, no hay registro oficial.

El diputado suplente Jesús Manuel Vázquez Medina ni siquiera ha subido su curriculum a la página, sin embargo, en su perfil fe Facebook señala que estudió hasta la Secundaria Federal Miguel A. López en el municipio de Jiménez; y tampoco el diputado rebelde del PRI y adepto del PAN Jesús Velázquez Rodríguez comparte su grado de estudios ni aparece en el registro de cédulas profesionales.

Y hubo también quien ocultó información como la diputada prisita Rosa Isela Gaytán, quien señala solo tener una licenciatura en Derecho, pero también cuenta con cédula como maestra en Derecho Político y Administración Pública.