LUIS Serrato Castell, miembro del equipo del defenestrado y procesado ex gobernador Guillermo Padrés Elías, está equivocando la estrategia de operación del Gobierno de Chihuahua.
Para empezar, el Coordinador de Gabinete solamente atiende a «gente bien» o personas de poder económico, por aquello de los «bisness», aunque eso le acarree problemas y compromisos a la Gobernadora, y de ahí para afuera a todos los demás los trata como liebres orejonas. Serrato Castell, un junior de Hermosillo, Sonora, piensa en el negocio y se frota las manos de pasear y posicionar a su jefa en el ambiente nacional, siendo que eso le puede acarrear conflictos a la panista Campos Galván.
LA gobernadora Maria Eugenia Campos estará informada de la nueva contratación en la Secretaría de Desarrollo Económico del hijo del morenista Juan Ramón Flores Gutiérrez.
Y es que la Manque Granados contrató a Juan Ramón Flores junior para trabajos de comunicación, sin contar con el papá brindó todo su apoyo a Juan Carlos Loera de Morena en el pasado proceso electoral. Actualmente Flores Gutiérrez labora en la Secretaría de Educación Pública del gobierno de Andrés Manuel López Obrador.
Acaso Campos Galván está haciendo nuevas alianzas en el gobierno federal o le están metiendo gol, es pregunta.
OJALA el presidente Andrés Manuel López Obrador ponga orden al desmother que se traen con la vacunación contra el Covid-19. Tan solo ayer, personal militar estaba a punto de enfrentarse con ciudadanos en el Centro de Convenciones debido que estaban coléricos por la pésima organización. No era para menos, ya que personal de la Secretaría de Bienestar del Gobierno de México no les importó que estuvieran 7 horas en fila cuando sabían que el lote de vacunas iba terminarse.
Se veían padres de familia comiendo con sus hijos desde la 1 de la tarde para que aguantaran la espera, además que el recinto exterior de Centro de Convenciones no existía para nada la sana distancia, pero todo eso les valió a los organizadores.
Alrededor de las 4 de la tarde empezaron a decirles los organizadores a los jóvenes que se fueran a sus casas, pues se habían terminado las vacunas por hoy, lo que desató la furia de los afectados, y empezaron a provocar golpes a los cristales y ponerse al “tú por tú” con los de los soldados quienes estaban listos para el enfrentamiento. Al interior había jóvenes y sus familias que apenas alcanzaron la vacuna, a los cuales les advirtieron que no podían salir ya que había “un motín” al exterior, por lo que estuvieron “secuestrados” más de una hora que se controló la situación.
Qué pena que personal del presidente Andrés Manuel López Obrador lo siga poniendo en mal.
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