México. – “¿En qué momento te volviste un asesino?”, así cuestionó Erika Janeth a su hijo Braulio, quien fue detenido por el feminicidio de sus hermanas menores de edad, en Tecámac, Estado de México.
Por medio de una carta revelada en redes sociales, que ha generado conmoción entre los usuarios, donde Erika cuestionó a su hijo sobre el momento en el que cambió tanto.
Braulio fue sentenciado a cumplir una condena en prisión por el delito de feminicidio en septiembre pasado, pues mató a sus pequeñas hermanas Yiyari y Diana, de 12 y 7 años.
El feminicida fue un niño hiperactivo, pero cambió en la adolescencia
En la carta revelada por la activista Frida Guerrera, Erika recordó con nostalgia el tiempo que estuvo embarazada de Braulio.
Erika contó en la carta que su hijo Braulio, fruto de su relación con un hombre llamado Rubén, era hiperactivo desde pequeño.
Sin embargo, recuerda Erika, cuando llegó la adolescencia, Braulio comenzó a cambiar, pues se mostraba inestable debido a que no quería estudiar, comenzó a robarle dinero y hacía lo que él quería.
El brutal cambio de actitud en su hijo, culminó cuando el joven que aún no supera la mayoría de edad se consumó como feminicida, fratricida e incluso intentó arrebatarle la vida a ella.
“Fuiste creciendo y eras un niño muy hiperactivo, recuerdo muy bien en la escuela para que te portaras bien. Llegaste a tu adolescencia y empezaste a cambiar. Tu inestabilidad al no querer estudiar, de agarrar dinero, de querer hacer lo que tú querías y de quitarles la vida a tus hermanas y a tu hermano”
:quality(70)/cloudfront-us-east-1.images.arcpublishing.com/sdpnoticias/3L36K7MJCFHHVCKSEXQG52SDKM.jpeg)
Braulio fue sentenciado por el feminicidio de sus hermanas
Braulio fue sentenciado por el delito de feminicidio en septiembre pasado. Fue detenido después de que en noviembre del 2020, mató a sus hermanas.
A finales de noviembre, Erika fue a trabajar al restaurante donde se encontraba laborando, dejando en su casa a sus hijos menores y al hoy sentenciado.
Como medida de seguridad, Erika acostumbra llamar de forma constante a sus hijas para saber cómo estaban, sin embargo esa noche las niñas no respondieron el teléfono.
Sin más que hacer, Erika tuvo que esperar al término de su turno para regresar a su casa y saber entonces qué ocurría con Yiyari y Diana.
Cerca de la una de la madrugada, Erika llegó a su casa y se encontró con la peor escena: Braulio estaba estrangulando a una de las niñas.