Tras el fallo del juez Waldemar Cláudio de Carvalho, del tribunal de Justicia Federal de Brasilia, los psicólogos de Brasil podrán realizar terapias de conversión sexual para tratar a la homosexualidad como una enfermedad.
Con ello, los especialistas tendrán “plena libertad científica acerca de la materia, sin ninguna censura o necesidad de permiso previo”, aún cuando el propio Consejo Federal de Psicología calificó la decisión como un retroceso inmenso.
“Legitimar el discurso de que existe una ‘cura gay’ supone abonar aún más el sustrato homófobo que hace que Brasil sea uno de los países que más homosexuales mata en el mundo”.
En Brasil, las parejas del mismo sexo pueden contraer matrimonio gracias a una decisión judicial, más no por una proyecto legislativo, y tan sólo en 2016, 340 personas fueron asesinadas por crímenes de odio. Fue en 1990 cuando la OMS retiró a la homosexualidad de la lista de enfermedades mentales.