Los elementos de la Policía Vial ya de a tiro no saben cómo pedir que le pongan orden a la corporación, pero sobre todo a las corruptelas de varios mandos, que quien no se somete a sus órdenes terminan por tronarlo o bien moverlo a puntos donde quedan sometidos.
El descaro de las denuncias han llegado a tal grado, que el propio secretario de Seguridad Pública Estatal, Gilberto Loya reconoce que no se trata de una amenaza en su contra, pero sí de un reclamo al interior de la corporación, en la que El Grupo Sosa es el mandamás tanto en la Policía Vial como en el C4.
Desde hace varios años Los Sosa han mantenido un poder casi inamovible en la corporación, por encima de los directores, subsecretario y ahora falta ver si también por encima del propio SSPE.
No es para menos la cosa tomando en cuenta que varios de los mandos señalados, tienen acusaciones serias en instituciones de procuración de justicia, sin que tengan alguna consecuencia.
El ahora senador, Adán Agusto López anda como queriendo cantarle un tiro al alcalde de Ciudad Juárez, Cruz Pérez Cuellar para marcar su territorio y sin decirle una palabra pedirle un trato más “justo” a la también aspirante a la Gubernatura, Andrea Chávez.
Bueno al menos ese es un rumor muy fuerte que se ha soltado en la frontera, donde afirman que la relación estrecha de trabajo entre ambos senadores, Adán y Andrea ha permitido que el tabasqueño se tome atribuciones de esa naturaleza.
Sin embargo, a Adán Agusto López se le ha olvidado que ya no es secretario de Gobernación, que ya no puede poner y quitar candidatos a su gusto y, por el contrario, en Ciudad Juárez poco es el negocio que tiene que hacer.
La llegada de unos cuantos miles de inmigrantes esta semana fue solamente una probadita de lo que está preparado para principios del mes de enero, y es que hay un reporte sobre varias caravanas que están listas para ingresar a Chiapas e iniciar con su travesía hacia Chihuahua.
Estas caravanas se ha detectado vienen bien protegidas por las propias autoridades y luego llegando a Mápula los dejan a su suerte, para generar las famosas crisis migratorias, y el rumor que les han desatado los extranjeros es que les darán paso libre a los Estados Unidos.
Será en enero cuando inicie la pugna entre el Gobierno Federal y Estatal por decidir de quien es la responsabilidad y busque que truene lo más posible antes de la toma de protesta de Donald Trump en febrero