La Comisión Estatal de Derechos Humanos (CEDH) solicitó a la Fiscalía de Chihuahua acatar la resolución 21/2016, donde la obliga a ofrecer una disculpa pública y reparar el daño causado al exfuncionario estatal, sin embargo han incumplido.
Víctor Manuel del Valle señalo en entrevista a www.laparadadigital.com que a pesar de nunca existió una denuncia de las acusaciones que lo señalaban de haberle cobrado a un ciudadano que le solicito apoyo, un boletín de prensa ordenado por Rocha Acosta y trasmitido en medios de comunicación le ocasiono un daño moral irreparable.
“Fueron acusaciones falsas, dolosas, injustificadas, tendenciosas e injustas de que fui objeto, ya que se me acuso de maneta infundada de actos de corrupción , sobornos y extorsión, mismos que fueron publicados en los medios de comunicación impresos, electrónicos y digitales el 10 de mayo de 2015, y además días posteriores a nivel estatal nacional y por la internet”, indico Víctor Manuel del Valle.
El ofendido pide que por éste medio se limpie su nombre debido a que le ha afectado en su entorno laboral, ante ello ha solicitado la intervención del fiscal general del estado, Jorge Gonzalez Nicolás, pero no le ha respondido.
Así mismo el depuesto director de la Policía Cibernética de Chihuahua, mostro papeles oficiales donde se indica que nunca fue investigado por ninguna autoridad ni tampoco se le imputa ningún delito por “actos de corrupción”.
Indicó que un día le dieron permiso para tomar vacaciones, y al regresar, le señalaron que estaba despedido. Días después, observó en los medios de comunicación las acusaciones en voz de Pablo Rocha. “Posiblemente fue por cuestión de egos, ya que a Rocha no le gusto que yo saliera dando declaraciones en los medios de comunicación acerca de mi trabajo de atrapar delincuentes por el ciberespacio, ni lo logros importantes que teníamos”, indicó.
Además menciono que también al comandante no le gustaba tener competencia, por lo que le molestaba cuando hablaban de los logros de la “Policía Cibernética”, por lo que prohibió ese nombre, y cambio fue “Unidad Estatal de Delitos Electrónicos e informáticos”.
