EUA.- Los directores de las principales redes sociales, Mark Zuckerberg, de Meta; Linda Yaccarino, de X; Shou Zi Chew, de TikTok; Jason Citron, de Discord, y Evan Spiegel, de Snap, fueron interrogados ayer por el Congreso de Estados Unidos sobre los riesgos que sus productos representan para los jóvenes, una vez más, y fueron acusados de tener “sangre en sus manos”.
El senador republicano de Carolina del Sur, Lindsey Graham, dijo a los directores ejecutivos de tecnología en sus comentarios de apertura: “Tienen sangre en las manos. Tienen un producto que está matando gente… ¡Si no los pueden demandar, deberían hacerlo! Ha llegado el momento de derogar la Sección 230”.
La Sección 230 es la ley federal que inmuniza a los sitios web y plataformas de redes sociales por sus decisiones de moderación de contenido y por demandas que surjan del contenido generado por los usuarios. Además, se pidió que ya se aborde una regulación en forma contra las redes sociales que han generado mucho daño a la sociedad en general.
La audiencia llamada Las grandes tecnologías y la crisis de explotación sexual infantil en línea se debe a los diversos casos de suicidio derivados de bullying o explotación sexual a través de redes sociales, así como investigaciones que han demostrado que, por ejemplo, los niños en Instagram y Facebook eran objetivos frecuentes de acoso sexual, y de robarles sus datos sin su consentimiento desde 2019.
The Wall Street Journal publicó el año pasado que los algoritmos de recomendación de Instagram permitieron una red de pedófilos que buscaban contenido y actividad sexual ilegal de menores de edad.