México.- Una mujer se dio cuenta que su intimidad había sido quebrantada cuando personas cercanas le avisaron que su ex pareja estaba compartiendo videos íntimos de ella.
Inclusive, el agresor la contactó para amenazarla con difundir más material de tipo sexual con familiares de ella.
Desde enero de 2020, cuando se avaló actuar penalmente contra quien difunda sin autorización de la persona videos de tipo sexual, las denuncias aumentaron exponencialmente al reconocer que es una acción violenta con sanción ante la ley.
De 2020 a lo que va del 2024, un total de 6 mil 59 víctimas han denunciado ilícitos de este tipo, de acuerdo con el reporte de Datos Abiertos de la Ciudad de México a febrero de este año.
En 2020, fueron 722 personas quienes abrieron una carpeta de investigación y a partir de ahí se ha visto un alza sostenida, registrando en el 2023 un crecimiento de 150.9 por ciento respecto del primer año.
Marcela Hernández, activista y quien coordinó el informe de Violencia Digital del Frente Nacional para la Seguridad, señaló que esa alza está relacionada con dos factores.
Uno, que conforme se hace más accesible la tecnología, los agresores tienen mayor facilidad de usarla para violentar la intimidad sexual de las personas, ya sea con la difusión o producción de contenido íntimo sin permiso.
Y dos, que al saberse respaldadas por una legislación que sanciona esas conductas, las víctimas se atreven a denunciar.