MELQUÍADES Díaz Meza, alias “El 13” no tenía reparos en vivir en Guachochi como cualquier otro ciudadano, ya que sabía que tenía protección.
Señalan las fuentes policiacas que no le pasaba al también conocido como ‘El Chapo Calín’ que de pronto su vivienda de la colonia Lindavista estuviera rodeada para su pronta detención, pero esto ocurrió. Los agentes llegaron a ese punto desde el domingo 8 de agosto y esperaron una orden de cateo obtenida por la FGR.
El capo se atrinchero en su vivienda de la calle Barrancas de la Sinforosa, y tuvo tiempo de contactar a varios abogados y personas importantes. Eso fue la mañana del martes, donde Díaz Meza presentó un amparo con la clave 1333/2021-VII para evitar su detención.
Von ello sus abogados trataron de persuadir su detención, pero cuando se dieron cuenta que se trataba de un operativo MERAMENTE MILITAR, toda esperanza se vino abajo.
Se dice que para lograr esposarlo tardaron muchas horas, donde el Ejército comprobó que ‘El 13’ era una pieza importante del Estado por medio de sus corporaciones policiacas, por lo que al ser llevado a la Fiscalía General de la Republica (FGR) en Chihuahua, ni parte dieron a la Fiscalía General del Estado (FGE) y menos a la Secretaria de Seguridad Pública Estatal (SSPE).
El capo detenido se le identifica como lugarteniente del Cártel de Sinaloa en la sierra sur de Chihuahua, un generador de violencia en Guachochi y objetivo principal.
Según los, este sujeto es natural de Ciudad Juárez y actualmente tiene 47 años, pues nació el 14 de abril de 1974. Se involucró con los sinaloenses a través de la familia Salgueiro.
A pesar que muchos puedan decir que el Gobierno del Estado de Chihuahua nunca ha trabajado, en estas últimas semanas que le quedan a la administración, están peor que eso.
Son varias dependencias donde sus encargados ya cerraron el negocio, inclusive ya ni se les ve en sus oficinas ni para la foto del face.
De los tramites que pudieron hacerse en varas dependencias, estas quedaron archivadas, pero eso sí, si tiene que ver con dinero a las arcas gubernamentales, están agarrando todo lo que puedan.
Donde preocupa esta webonada oficial, es en la Secretaria de Salud, y la Secretaria de Educación, donde las clases empiezan este mes, y aun no se sabe cómo va funcionar.
HABLANDO del regreso a clases, Óscar Ibáñez Fernández, vocal ejecutivo de la Junta Central de Aguas y Saneamiento (JCAS) se agarró hablar como si estuviera en elecciones.
Según esto, prometió que habría agua en todos los planteles escolares del estado, ante el regreso a clases.
Lo que se le olvido a este funcionario hablador es que en varias escuelas aún les falta infraestructura hidráulica instalada y sistemas de almacenamiento, y resulta que eso es lo condicionante para que no les “falte agua”
Las escuelas públicas no tienen infraestructura hidráulica, es más varias sin drenaje, y con ello se deprenden más problemas, pero ya viene el regreso a clases donde debe haber agua para de perdis, lavarse las manos con jabón.
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