MUY contentos están en la Policía Vial porque van a descansar, de perdida un rato, del Inspector Jefe, Víctor Hugo Sosa Cázares, porque lo mandaron a la banca mientras lo investigan tras la acusación de que protege al jefe César Vargas, quien fue señalado como acosador laboral por una agente. Otro Sosa que también está en gobierno es Jesús Isidro Sosa Cazares, con puesto de director de área de recursos materiales de la Secretaría de Seguridad Pública del Estado (SSPE), donde aseguran que no lo quieren por diferentes motivos.
Ya lo habían denunciado ante la Secretaría de la Función Pública por los movimientos que se hicieron en el traslado de personal de Chihuahua a Juárez, el año pasado, pero quién sabe en qué quedo ese asunto. Otra bronca que está pendiente, en el área de Jesús “El Chilo” Sosa, es la basura que sacaron del penal de Aquiles Serdán y que fue tirada en un lote baldío y no en el relleno sanitario.
De ese problemilla se dijo que se iba a investigar, que se tenían datos concretos pero todo sigue igual. Bueno, casi todo, porque los millones que se pagaron a una empresa privada para el trabajito esos si salieron del gobierno.
A quién le duro poco el gusto de estar al frente de la delegación de la Profeco en Chihuahua es a Teokali Hidalgo. Nos informan que nomás supieron que aparte de la piel camaleonesca, usaba las siglas del Gobierno Federal / Morena, para sus intereses, le dieron aire. A muchos no les gusto que anduviera ya metida en asuntos de campaña apoyando a personajes en asuntos para diputados y senadores, y le fueron con el chisme nada menos que al ex Secretario de Gobernación, Adán Augusto López Hernández, pues el asunto es que Teokali Hidalgo anda bateando para varios colores. Un día es priista, otro Morenista, y luego que se pone colágeno, y se va con México Republicano. Según esto, la corcholata más vieja es quién pidió que la corrieran de ese puesto, y quién le sopló al oído tal decisión, sería su pareja, Andrea Chávez, quién ahora tiene tapizado Chihuahua con sus espectaculares.
Por ello, ahora de nuevo están acéfala la oficina de la Profeco en Chihuahua, pero poca importancia le dan los chihuahuenses, ya que nunca atienden a los parroquianos en esa mentada oficina de defensa al Consumidor.
COMO ni va estar el Estado, otra vez, sumido en la violencia, si tan solo en su territorio matan y venden droga a nombre de 20 patrones.
Según una investigación de más de seis meses, que incluye datos del gobierno federal y las fiscalías estatales, así como la consulta de fuentes abiertas y la revisión exhaustiva de documentos hackeados a la Sedena por el colectivo Guacamaya, indica que en el estado de Chihuahua están identificados 20 grupos delictivos que operan en 54 de los 67 municipios, es decir, en el 85 por ciento de la superficie de la entidad. Quién soltó el dato fue la firma AC Consultores.
El estudio revela que las garras de los grupos criminales se han hecho presentes en el país por medio de ejecuciones, masacres, narcomantas, extorsiones, secuestros, videos amenazantes e, incluso, asesinatos de policías, políticos y funcionarios. Estos hechos han sido detectados en mil 488 de los 2 mil 471 municipios que hay en el país, y Ciudad Juárez llama mucho la atención ya que operan 12 grupos del crimen organizado en sus calles. El más preponderante es el Cártel de Sinaloa que está en 45 de los 67 municipios, que abarca el 56 por ciento de la superficie del territorio estatal, y el Cártel de Juárez tiene una presencia en 30 de los 67 municipios, abarcando el 62 por ciento de la superficie.
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