YA se supo que de nada sirve que a los agentes de la Dirección de Seguridad Pública Municipal les practiquen el examen de COVID-19, primero porque dicen que les hacen la prueba “de la barata” o la que no es muy eficiente pues para saber todo lo que deberían saber, luego porque para cuando se les hacen ya estuvieron contagiados y ya hasta se recuperaron en casa, sin tener certeza de si pusieron en riesgo o no a su familia, y luego porque ven cómo otros agentes sí tienen acceso a la prueba de diagnóstico que puede ser la molecular o RT-PCR, que a diferencia de la otra, la de anticuerpos, sí puede arrojar si se tiene una infección activa de coronavirus para tomar las medidas necesarias, y obviamente se trata de los escoltas de la alcaldesa de Chihuahua María Eugenia Campos, quienes pueden tener acceso de manera constante a estas pruebas para saber si se han contagiado y entonces tomar distancia de su protegida. Mientras, el resto de los policías solo pueden saber si ya fueron contagiados, y de ser así dado que el resultado se los entregan en un sobre cerrado, el Municipio ni siquiera se da por enterado que un resultado fue positivo, además de que en los casos en los que sí se llega a enterar que hay un agente enfermo no lo manda a casa a resguardarse, poniendo en riesgo no solo a sus compañeros sino a la gente que tiene contacto con él.
EN la Junta Central de Agua y Saneamiento (JCAS) donde sus directivos están realizando un mal manejo de la pandemia que atraviesan, y lamentablemente no se han tomado las medidas necesarias y pertinentes por parte del Director Financiero el C. P. Ángel González Grajeda, a cargo de la JCAS, en ausencia presencial del Dr. Oscar Fidencio Ibáñez desde el inicio de la pandemia.
Señalan que han tenido varios contagiados y un fallecimiento, y pesar de ello el El C.P. González junto con la Dra. Ana Elizabeth Arroyo no siguen el protocolo de salud y el acuerdo publicado tanto por gobierno federal como el estatal.
No dan permiso al personal que se ve afectado de salud de no asistir a sus labores obligándolos a presentarse, así mismo a los empleados que conviven con personas infectadas dentro y fuera del lugar de trabajo no se les aísla obligándolos a presentarse, tal es el caso del el C.p. Aguilar quien lamentablemente perdió la vida a causa del COVID.
El personal vulnerable, según los acuerdos federales y estatales (enfermedades como diabetes, e hipertensión) deben seguir presentándose a laborar, y la misma Dra. Ana Elizabeth Arroyo lo aprueba, ya que ha dicho que dichas enfermedades no son de riesgo al estar controladas y el contador ha dejado claro que el que se quiera ir deberá recibir menos sueldo, pues esto no es de mayor importancia y todos se van a contagiar
“Señor con la vida no se juega, a nosotros sí nos importa la salud y la familia, trabajamos por necesidad no por gusto. Ustedes solo quieren seguir manteniendo la JCAS para darse a conocer como los súper trabajadores responsables a costa de los demás, porque si supiera desempeñar sus labores como dice no necesitaría de gente misógina que ha tenido demandas formales para que saquen su trabajo”, indican.
“Si bien no somos esenciales como los organismos operacionales, debido a que somos normativos pudiéramos desempeñar labores en casa, para lo esencial y no sus caprichos de remodelaciones o limpiar bien su oficina…ojalá el Dr. Ibáñez se diera cuenta de todo, pero como reside en Juárez no está al tanto de lo que sucede con su personal.
Y el presidente del Consejo de la JCAS no se sabe dónde está, y ni aboga por nadie el C.p. Ismael Rodriguez de lejitos no pasa nada”, señalaron a “Sin Pelos en la Lengua”.
Cabe señalar que cada director de área es responsable de su personal y el cómo lleva a cabo los protocolos, es el caso de la dirección jurídica, los cuales realizan guardias de su personal, o la dirección ejecutiva dónde el encargado de comunicación desde inicio de pandemia no se ha presentado a laborar aún y cuando no es del grupo vulnerable, más sin embargo todo el personal de dirección ejecutiva se sigue presentado, la dirección financiera en ningún momento ha establecido Home Office, guardias y otro método de trabajo incluso exige la presencia de su personal aún y cuando esté presente alguna enfermedad o síntomas de covid.
Dejan en claro que la JCAS carece de una dirección institucional. La dirección técnica continúa con su trabajo normal o en mayor escala incluso sin disminuir salidas de supervisión a los diferentes municipios poniendo en riesgo la salud de los empleados y de los habitantes del municipio ya que salen hasta tres veces a la semana y el Home Office es prácticamente nulo. “Los empleados han tenido que tomar sus vacaciones debido a que no existe ningún otro medio de resguardarse sobre todo los vulnerables, al haber varios casos de COVID confirmados dentro de las oficinas”, finalizaron.
TRAS la muerte por CIVID-19 del presidente del Instituto Estatal Electoral Arturo Meraz González varios han asomado la cabeza, pero con mucha prudencia por estar un abierta la herida del suceso.
Seria en enero cuando será nombrado el nuevo titular por parte del Instituto Nacional Electoral (INE), y debido que ese año serán las alecciones, es mucha mayor la urgencia de alguien “cómodo”.
Para la designación del consejero presidente del Instituto Estatal Electoral se hablaba de la actual presidenta provisional, la consejera electoral Claudia Arlett Espino, pero señalan los enterados que no se puede por cuestiones de tiempos, ni alguno de los otros consejeros actuales.
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