SE le acabó la luna de miel al Secretario General de la Federación de Sindicatos y Organizaciones Independientes del Estado de Chihuahua, Pancho Salcido Lozoya. Por dos años estuvo besándoles los pies a Maru Campos y sus aliados, apoyándola en campaña con decenas de transportistas.
Para Pancho, Maru la única que tenía compromisos claros y serios con el gremio y que ofrecía un proyecto de gobierno sólido y viable conforme lo necesitaba Chihuahua, pero ayer se refería a la gobernadora como “esta”.
“Hoy se cumple un año exactamente que le pedí a quien está al frente del gobierno del estado una cita, y todavía no recibo respuesta, veremos qué sucede en los próximos cinco años… felicidades a la cita, hoy cumples un año!!!”, escribió el político camaleón, ya que de priista se vuelve morenista, y después panista.
Es sabido que Pancho Salcido no da paso sin huarache, y es por eso que anda de un lado para otro buscando beneficiarse de manera política y económicamente.
Primero anduvo apoyando a la CTM, donde fue acusado de “rata” ya que manejaba como dirigente dinero de las cuotas y manejando, en forma personal, la caja de ahorro de los trabajadores. Posterior, se fue a Morena como Secretario General de la Confederación Autónoma de Trabajadores y Empleados de México (CATEM), donde también tuvo los mismos problemas. Al final no le quedó otra que irse al PAN a lamber botas, pero como no dejaron hacer negocio, simplemente se desesperó y empezó a tirar “shit”. Así las cosas con el exdiputado duartista del menudo.
EN el despacho de la División de la Policía Vial todos hacen y desasen a su antojo, al carecer de un verdadero encargado. Se supone que César Komaba Quezada está detrás de bambalinas, pero ahorita están enfocados a la recaudación que den las placas nuevas.
Es tanto el descaro que la clásica mordida se lleva a cabo de manera descarada a cualquier hora del día, y tal fue el caso que le ocurrió ayer cerca de las 16:00 horas en el cruce de la avenida de la Industrias y calles Jiménez de la colonia Revolución.
Todo ocurre cuando a bordo de la unidad 1032, una pareja de agentes de vialidad detienen a un vehículo de la línea Nissan de modelo atrasado.
El conductor que negó haber ingerido bebidas embriagantes fue amenazado por los prepotentes agentes de vialidad, quienes le dijeron que al no portar su licencia de conducir tendría que ser llevado a las instalaciones de vialidad, hacer el examen médico y detener su vehículo, o dejarlo circular si llegaban a un arreglo.
Al conductor no le quedó más remedio que dejar su vehículo en prenda para irse caminando calles más abajo donde tiene su domicilio para conseguir los 300 pesos que le solicitaban los agentes.
El colmo fue que los de vialidad, ante la mirada de decenas de vecinos, se quedaron estacionados atrás del vehículo esperando a que el conductor regresara con el dinero.
El conductor y su automóvil ya están en su casa, mientras que los agentes siguen al asecho de más infractores por la avenida de las industrias.
HABLANDO de transportistas, los tráileros están a punto de solicitar protección policíaca al ser amenazados por supuestos integrantes del Cartel de Juárez.
Luego del accidente fatal en Ahumada, donde pesan 10 muertes contra el guiador de un tráiler drogado y a exceso de velocidad, los mafiosos les pusieron un memorándum para que manejen “a vuelta de rueda” por ese municipio, y demás.
“No van a discutir, no van a averiguar, simplemente le van a dar piso al compañero que incurra en la falta”, dice un audio la advertencia. También la amenaza fue colgada en redes sociales.
Así que queda prohibido circular a más de 30 km/h en zonas pobladas en todo el estado, ya que sobre advertencia, ni hay engaño. ¿Y la autoridad? Pintaba como siempre, haciendo los “malosos” su jale.
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