QUIÉN sabe si le jalaron las orejas al fiscal general del Estado, Roberto Fierro, para que no presentara la queja contra un juez de control que dejó en libertad a un detenido con 34 mil pastillas de fentanilo, a finales del mes pasado.
Por cierto, en ese caso, la detención se anunció con bombo y platillo; dijeron que fueron tres los detenidos y al final solo presentaron a uno ante el juez y a los otros dos les dieron la libre, dizque porque no tenían vela en el entierro. ¿Será?
De pilón, al único detenido por el aseguramiento el juez lo dejó libre, dizque porque como es del fuero común, pues ese asunto no era de su competencia.
Fue el motivo por el que el fiscal anunció que presentaría una queja en contra del juez y conforme pasaron los días como por arte de magia se optó por no presentar la queja.
Comentan que las cosas están medio raras, como que están ocultando algo muy canijo.
CON la novedad que en el Gobierno del Estado ya se gastaron el dinero de todo el año, y aún quedan dos meses y medio para pagar lo más elemental, como son los salarios y aguinaldos de sus trabajadores a lo largo y ancho de la entidad.
El Secretario de Hacienda, José de Jesús Granillo Vázquez ya advirtió de esta situación, pues echando números les faltan unos cuantos millones para no tener problema con el pago de nómina a los empleados estatales, ni con los viajes y placeres de la gobernadora, el vicegobernador, y su grupo. Por lo pronto, no se les ocurrió otra ideota que bajar las compensaciones a los simples empleados y lo peor, ya trabajan en un proyecto de retabulación de sueldos, esto es…les bajaran el sueldo.
Los jefes, los que están en primer nivel no se les tocara para nada sus lujos, pero ya bajaron la orden que necesitan ahorrar para cerrar bien el año, y habrá que hacer un sacrificio, y a quien no le guste, pues que RENUNCIE, al cabos hay muchos priísta que quieren entrar a trabajar a la administración de Maru Campos.
Así que aquí está el anuncio, la exclusiva de un problema de “dineros”, y todo por agarrar manos llenas desde que comenzó esta administración.
PERSONAL del Hospital Central anda preocupado por el actuar de los directivos, ya que andan contratando médicos de poca o nada reputación. Indican que metieron en nómina a un doctor señalado de acosador en repetidas ocasiones por organizaciones feministas.
La autoridad competente de estos casos tiene hasta denuncias contra el medico llamado Gerardo, ya que acoso y se comprobó que ejerció actos de abuso sobre una de las víctimas y se determinó darlo de baja del curso de especialidad al galeno.
A pesar de ello, el medico que está plenamente identificado ahora es protegido en el Hospital Central.
