Una flor por sí sola es un presente maravilloso; pero ¿sabías que muchas flores tienen un concepto propio?

Si no desea decir algo con palabras inciertas, lo puede hacer mediante una flor. Razón por la cual las obsequiamos, puesto que transmiten un mensaje.

De hecho, las personas lo empleaban en la Edad Media, en aquel momento, era habitual que los hombres obsequiaran flores a aquellas mujeres las cuales despertaban cierta  atracción. El famoso lenguaje de las flores o floriografía, se originó en el XVII y repentinamente, una amplia variedad y colores poseían ciertos conceptos.

En la actualidad, normalmente enviar flores, es tradicional en fiestas de cumpleaños, aniversarios, situación de reposo, nacimientos o sencillamente darle un regalo a un ser querido. Por lo general, resulta adecuado obsequiar flores que estén acorde a la situación. Los ramos siempre son una gran idea.

De no encontrarse familiarizado, un buen florista puede asesorar sobre las flores que debería o no regalar, dependiendo el destinatario y la ocasión.

Los colores revelan más de lo que uno cree

Las rosas rojas son extremadamente populares, particularmente en San Valentín, simbolizan pasión y amor verdadero. Sin embargo, existen otras que verbalizan un idioma admirable, explican en Llevale flores, un sitio que no puedes obviar cuando una persona envía flores en Monterrey.

Como por ejemplo, Syringa Purpurea, “las primeras emociones del amor”. El Tulipán Rojo, “amor por siempre”. En tanto que el Jazmin, “te lleno de besos, embriagas mis sentidos”, simbolizando gracia y elegancia. En resumidas cuentas, existen un sinfín de maneras de decir “Te amo” por medio de una flor.

Origen de regalar flores en San Valentín

En vista que las flores son el lenguaje del amor, claramente festejan su nacimiento el día de San Valentín. Si bien, existen diversas historias acerca del 14 de febrero, nadie sabe con exactitud cómo se originó en realidad.

Los romanos ya conmemoraban en ese día una fiesta, Lupercalia. Fiesta en la cual adoraban a la Diosa Juno, protectora de la familia y el matrimonio. La mayoría de las personas obsequiaron flores esa fecha, donde los jóvenes estaban reunidos por oráculos. Fue así, donde a los jóvenes solteros se les autorizó emparejarse con muchachas solteras, pasando el día juntos, incluso algunas llegaron a enamorarse.

De modo que, el día de San Valentín no es precisamente como lo es en la actualidad, el día de las parejas, sino de los solteros que merecían un poco de afecto. En aquel momento, Claudio II, privó a los jóvenes de contraer matrimonio, puesto que los solteros resultaban ser mejores en la guerra.

San Valentin quien estaba en conflicto con esa orden. Casaba en secreto a las jóvenes parejas. Desafiando la autoridad imperial y siendo su infortunio, dado que al ser descubierto por el emperador, ordenó que fuera decapitado. Razón por la cual el 14 de febrero se transformó en el día del amor.

¿Cómo descubrir los gustos del destinatario?

Al optar como obsequio un ramo de flores, de ser posible, la mejor opción es dejarse orientar por las preferencias de la persona a regalar.

Dejar el gusto personal atrás, pese a que resulte difícil. A fin de cuentas, el ramo no debe complacer a uno, sino al destinatario. Considere investigar las flores o color preferido de la persona que recibe el obsequio. En la intimidad, amigos o familiares son una excelente fuente de información.

 

 

 

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