EL Comité Ejecutivo Nacional del Partido Acción Nacional no ve con buenos ojos y esta precupado de como se ha manejado la campaña de María Eugenia Campos. Por ello decidieron hacer algunos cambios ya que los números han bajado.
Por lo pronto, quitan a Arturo García Portillo como coordinador de la campaña de la candidata del PAN y PRD por la gubernatura, y en su lugar colocan a Luis Gerardo Serrato Castell.
Ahora Portillo solo se encarga de la campaña en la ciudad de Chihuahua, mientras que Serrato tiene unos cuantos días para mover gente que solo han perjudicado a la campaña al no actuar en situaciones de crisis.
Con ello, el CEN del PAN ve en riesgo la gubernatura en Chihuahua cuando ya tenía en la bolsa esa entidad al igual que Querétaro.
UNA atropellada toma de protesta celebró el Congreso del Estado el pasado viernes, al recibir, finalmente, a dos diputados suplentes, Enrique Raúl Márquez Contreras en sustitución de Obed Lara Chávez y Ulises Alvídrez Gutiérrez, en lugar de Francisco Humberto Chávez, de Morena. Al ahora diputado Márquez dos veces le preguntaron si protestaba cumplir y hacer cumplir las leyes, y él sin conocimiento de algún tipo, vaya ni de haber visto alguna vez una película, un acto político o aunque sea escolar, nomás no levantó el brazo derecho en señal de protesta, ninguna de las dos veces que le preguntaron porque por problemas técnicos, de pronto los legisladores parecían no escucharse. En el caso de Ulises Alvídrez rindió protesta solo con voz porque argumentó tener problemas técnicos por lo que no podía verse su imagen, además de que esta fue la segunda vez que se presentaba en sesión, toda vez que el jueves 29 de abril se presentó muy mono a sesión y aún ni le tocaba. El asunto aquí es que en cada inicio de legislatura el Congreso del Estado organiza, y seguramente eroga para ello, un curso de capacitación para los nuevos diputados, al que al parecer no invitan a los suplentes.
AL que tampoco tratan muy bien que digamos y hasta en su departamento de Comunicación Social desprecian es al rector de la UACH Luis Alberto Fierro, quien apareció muy trajeado en rueda de prensa para anunciar una convocatoria a unos foros que organiza la llamada máxima casa de estudios, hasta un tanto delgado se veía el funcionario, cualquiera diría que el confinamiento le ha sentado bien, aunque no tanto para sus propios empleados. Llamó la atención que en el comunicado oficial, salido de la propia UACH, solo se le mencionara como “las autoridades universitarias”, pero en ningún lado apreció su nombre, es decir, como si no hubiera hecho el gran esfuerzo de levantarse temprano, acicalarse y conectarse al zoom como para que todavía lo ninguneen y no le reconozcan ni su nombre mucho menos su autoridad.