La presentación de nuevos modelos de diversos vehículos de la marca Chevrolet era el pretexto del encuentro en el que había música y un ambiente alegre; a éste acudieron invitados especiales, familiares de los trabajadores, clientes y prospectos.
Un niño subió al automóvil color amarillo en cuestión, situación que no fue notado por los presentes, y comenzó a apretar los botones y mover el volante.
El problema se presentó cuando accionó el switch de encendido y la llave de proximidad se encontraba al interior del vehículo, por lo que el Camaro inició la marcha.
Debido a que el auto tenía puesta una velocidad y el freno de mano desactivado, éste se impactó contra un vidrio de la agencia ubicada en los alrededores de Perinorte.
El Camaro golpeó a una de las personas que estaba en el lugar, quien fue atendido igual que al menor al sufrir algunos golpes por el choque.
Luego del incidente, se llamó a las agencias aseguradoras para atender la situación.