COMO se las gastan en la Comisión Estatal de Seguridad (CES), donde se protegen los unos a los a otros a cuestas del mero, mero, o sea Óscar Alberto Aparicio Avendaño.
Hay varios casos de abusos y denuncias de elementos estatales hacia ciudadanos que los esconden y archivan, pero este hecho que viene a continuación es lamentable.
Para que no quede en chisme, hay una denuncia formal ante la Fiscalía General del Estado que se levantó en el Municipio de Gómez Farías en contra de un elemento estatal, mismo que es protegido del primo de Aparicio Avendaño debido que fue quién le dio chamba en las filas estatales tras haberlo sacado de la Policía federal.
Resulta que el policía trató de abusar de una menor de edad en el hotel Sierra Inn donde se hospedan los mismos agentes de la Comisión Estatal de Seguridad (CES), en el Municipio de Gómez Farías. Con engaños la forzó a besarlo, argumentando el agente tener 19 años de edad, cuando en verdad ya le “pega” a los 40 años.
Según la querella que se formalizó en contra del uniformado, este podría alcanzar una pena de seis meses a seis años de prisión por su hecho, pero su jefe directo llamado Hugo Zavaleta Aparicio, primo del titular de la Comisión Estatal de Seguridad (CES) le dio chance de perderse un rato, pero con goce de sueldo; esto es, lo sacó del Municipio de Gómez Farías y lo mandó a trabajar al resguardo de las minas.
Ahora solo falta que la denuncie se archive, como todas, y continúen los abusos en esta administración estatal.
MIENTRAS estos abusos policíacos ocurren, el Estado de Chihuahua continua en el “top cinco” donde más asesinatos se comenten.
Tan solo anoche ocurrieron dos eventos de sangre en distintos puntos de la ciudad donde cuatro personas fueron ejecutadas, y dos más resultaron heridas.
Así mismo el Fiscal Peniche ya advirtió que la cosa esta “caliente”, así que mucho cuidado con acudir a los bares y cantinas, pues andan trabajando los grupos de narcotraficantes que cuidan su chamba al “menudeo”.
LOS diputados del Congreso del Estado demostraron que nada importa violar las mismas leyes que ellos crean y aprueban, que sus “posicionamientos” son solo mediáticos, políticos, casi siempre sin sustento, casi nunca con repercusiones. 
Ayer martes, 15 diputados votaron a favor de la adhesión de la diputada del extinto Partido Encuentro Social Marisela Sáenz Moriel, al Grupo Parlamentario del Partido Revolucionario Institucional, la misma que según el diputado panista Jesús Villareal, no solo violó los procesos legislativos de informar primero a la Junta de Coordinación Política de este cambio, sino la misma Ley Orgánica que la obligada a adherirse o al Partido del Trabajo o a Morena, con quienes hizo alianza para lograr una curul. Un solo diputado votó en contra y dos más se abstuvieron de aprobar el asunto.
QUIÉN de plano se pasó de lanza fue el diputado Migue La Torre al asegurar que son miles los “cerillitos” despedidos al entrar en vigor la prohibición del uso de bolsas no biodegradables, pues tal cosa no existe, porque para empezar las cosas en nada han cambiado respecto al empleo de esas personas, y para terminar no son miles.
Por ello, además de casi regañarlo, el diputado Alejandro Gloria, lo convocó a no propagar la desinformación: poner en duda con efectos colaterales falsos de una medida que busca cambiar los hábitos de consumo para la mejora de las condiciones ambientales, no es la vía; porque hablar de un “posible desempleo” de las personas que empacan en supermercados, es dar vuelo a temores que han sido manifestados con desconocimiento de la reforma recién entrada en vigor, y es falsa propaganda. Es entendible para el diputado La Torre, que busca ser candidato a la Presidencia Municipal, y que aprovechando el desconcierto por la aplicación de la reforma, se sacó de la bolsa la propuesta de exhortar a los niveles de Gobierno Federal y Estatal, tomen las acciones necesarias para hacer frente al “posible problema” de desempleo cuando los establecimientos comerciales estarían obligados a ofrecer bolsas de materiales biodegradables.
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